Natura, "El Poder de la Vida" 3ª y última parte

Esta es la tercera y última parte del estupendo relato de Francisco Almazán sobre las aventuras de Nerea y sus amigos tratando de impedir que las fuerzas oscuras acaben con la vida y la belleza del planeta Tierra sumiéndolo en un desierto de tristeza y desolación.
Desde aquí quiero darle mi mas sincero agradecimiento a Francisco por su generosidad al compartirlo con todos nosotros por medio de este sitio.
Todos los que deseeis hacer algun comentario podeis hacerlo, y los que querais descargar el relato en formato pdf. lo podéis hacer desde aquí.

Y ahora disfrutad de la tercera y última parte de Natura "El Poder de la Vida"








IV

El Tercer Poder
“Tierra”

- ¿Cuál es el siguiente? - Pregunto Nerea con voz firme y segura.
- El poder de la tierra, si no hay tierra fértil no hay vida debéis ir a las cuevas sin fin, la sombra lo ha ocultado en lo mas profundo del planeta Aristos,tener mucho cuidado. - Explico Natura.
- Pues en marcha no hay tiempo que perder. -Alentó la muchacha a sus dos amigos.
- Cuenta conmigo. - Afirmo Trialun.
- Y conmigo. - Añadió Necors.
Nuestros amigos cruzaron nuevamente la cascada y se encontraron en la entrada de una enorme cueva oscura y terroríficamente silenciosa.
En sus pensamientos más íntimos y secretos, les invadía el miedo, pero sabían que en sus manos estaba el destino de la vida.
Comenzaron a caminar con paso firme y decidido, pero después de un par de horas parecía que la cueva no tuviera fin, hasta que llegaron a una especie de rotonda donde había diez nuevas entradas a diez nuevas cuevas.
- Ahora que, ¿por cual seguimos? - Exclamo Trialun.
- No lo se estoy cansada y desorientada. - Contesto Nerea.
- Escúchame, mi pequeña guerrera, concéntrate, busca en tu interior y la vida te guiara. -Susurro Natura desde la distancia en el oído de la pequeña niña.
Nerea cerró los ojos y unos segundos después giro a la derecha y señalo una de las cuevas.
- Es por ahí.
Nuestro pequeño ejército siguió caminando alerta y con el miedo atado a sus talones, cuando sin previo aviso un derrumbamiento les cerró el paso.
- ¡Cuidado la cueva se derrumba ¡ - Alerto Trialun mientras apartaba a Nerea del peligro, y la ponía a salvo del nuevo ataque de su cruel enemigo.
- Ha faltado poco, gracias Trialun, maldita sea nos han cerrado el paso ¿como vamos a seguir?.
- Aun no se han enterado de quien es Necors, Nerea clavarme en la tierra.
Dijo el guerrero de las plantas con su poder mental, Nerea siguió las ordenes de Necors y lo clavo en la muralla de tierra y rocas que les cerraba el paso.
Necors empezó a extender una raíz que poco a poco atravesó el muro.
Una vez traspasado, la raíz empezó a engordar más y mas, presionando la tierra contra las paredes de la cueva, una vez que la tierra quedo bien prensada Necors se retiro quedando un túnel por el que todos pudieron pasar.
- Eres increíble Necors.
Los tres prosiguieron su camino y pasado un buen rato llegaron a un gigantesco salón del tamaño de una plaza de toros,
Al fondo del gran salón divisaron el ansiado poder de la tierra.
- ¡ Eh mirar! Ahí esta, a por el.
Pero justo cuando comenzaron a andar el suelo se partió en dos y una enorme grieta se abrió bajo sus pies, cayendo los tres hacia el oscuro vació.
Nerea pudo agarrarse a una piedra que sobresalía de la pared de la grieta, Necors como ya sabéis, casi todo el tiempo iba atado a la espalda de su gentil porteadora, pero si Nerea caía él también.
Lo de Trialun fue distinto, gracias a su poder especial, nada mas sentir el vació bajo sus pies se transformo en una paloma que remonto el vuelo.
- ¿ Estáis bien? - Pregunto Trialun desde lo alto.
- Es evidente que no, como haces esa pregunta, ¡haz algo!
Suplico Nerea mientras notaba que se le acababan las fuerzas, Trialun entonces decidió actuar, tomo tierra y se transformo en una enorme boa de unos siete metros y enrosco la cola en una estalagmita y comenzó a deslizarse hacia Nerea.
- ¡Tranquilos, que ya voy ¡ - Grito Trialun a sus dos amigos.
- Date prisa, no aguanto mas.
Replico Nerea, acto seguido se agarro de la cabeza de Trialun y comenzaron el ascenso, en mitad del rescate se dieron cuenta que la grieta comenzaba a cerrarse.
- Lo que faltaba, maldita la suerte y maldita la Sombra. - Renegó Necors en silencio.
- Nos va a aplastar ¡ Dios mío! - Grito Nerea.
- Voy lo mas deprisa que puedo. Pero Trialun no era lo suficientemente veloz para evitar la catástrofe.
Entonces Necors decidió actuar y cambiar el terrible destino que les aguardaba, se transformo en un enorme tronco que apuntalaba la grieta consiguiendo de momento frenarla.
- ¡Salir!, no aguantare mucho tiempo. - Advirtió Necors.
Nerea y Trialun consiguieron salir y ponerse a salvo, pero Necors se quedo dentro de la grieta.
- ¡Tenemos que ayudar a Necors!
Grito desesperada Nerea, pero….., sonó un crujido, el crujido de la madera noble al partirse y la grieta se cerro dejando una sensación de profunda amargura.
- ¡NOOOOOOO!
Desgraciadamente se volvió a escuchar el grito desgarrador de nuestra heroína al sentir la perdida de otro valeroso amigo.
Sin tiempo a que afloraran los sentimientos de pena, del techo de la gran galería empezaron a caer estalactitas que se precipitaban violentamente hacia nuestros dos guerreros.
-¡Cuidado Nerea! - Dijo Trialun mientras las enormes estalactitas se clavaban a su alrededor.
- Tumbate boca arriba en el suelo, las veras caer y las podrás esquivar.
Aconsejo Trialun a la asustada Nerea, la pequeña siguió las indicaciones y tumbada iba evitando las puntiagudas estalactitas que intentaban acabar con ella.
Mientras Trialun que se había transformado en una avispa intentaba guiar a Nerea hacia una zona fuera de peligro, nuestra valiente heroína comenzó a arrastrarse de espaldas.
- Sigue hacia la derecha, ¡no demasiado! un poco a la izquierda, no tanto caramba.
- ¡Dios! caen muy deprisa. - Grito desesperada la pobre Nerea.
- No te pares ahora, queda muy poco, unos metros más y estarás a salvo.
El bueno de Trialun alentaba a la niña mientras la guiaba hacia la salvación.
Por fin Nerea se puso a cubierto y misteriosamente la lluvia de estalactitas ceso, Trialun se acerco preocupado a la pequeña.
- ¿Estas bien?.
- Si tranquilo solo tengo algunos arañazos.
Sus palabras tranquilizaron al nervioso Trialun.
- Lo hemos conseguido tenemos el poder de la tierra fértil. - Afirmo erróneamente Trialun, pues de fondo se escucho una carcajada espantosa que provenía de un rincón oscuro.
- ¿Que demonios es ese ruido?
- No tengo ni idea.
Respondió un asombrado Trialun, pues del rincón más oscuro salio un Kruls, pero no era como los demás este media tres metros, con aspecto fornido y con pinta de tener muy mala leche.
- ¿Que diablos es eso?
- No se, pero creo que no viene para hacerse amigo nuestro.
Bromeo Nerea, resignada a luchar de nuevo para salvar su vida y de paso a la humanidad que vivía ajena a la guerra que se estaba librando.
- Trialun reacciono rápido y se transformo en un enorme rinoceronte blanco y arranco en una veloz carrera gritando hacia su enemigo.
Pero el Kruls detuvo el brutal impacto con una sola mano, levanto a Trialun y lo lanzo diez metros por el aire chocando contra la pared y cayendo inconsciente.
- ¡Maldito seas!.
Le grito Nerea al despiadado Kruls,el mal bicho se fue hacia Nerea, él la agarro del cuello y la levanto en el aire.
La niña notaba horrorizada la fuerte mano en su cuello que cada vez apretaba más y más, arrancándole sin piedad la vida.
Pero algo ocurrió, algo que nadie esperaba, del suelo surgió como ave fénix Necors en forma de raíces que envolvió al despiadado ser apretándole con rabia y consiguiendo que soltara a Nerea.
- ¡Estas vivo Necors!
Grito Trialun recién despertado de su pequeña siesta.
- Claro, no es tan fácil acabar conmigo y menos enterrándome en la tierra.
Respondio Necors mientras se enfrascaba en la batalla, Nerea que se empezaba a recuperar alzo la mirada y al ver a Necors se le ilumino la cara, el Kruls que todavía no se había rendido volvió a arremeter contra nuestros héroes.
- ¡Atención! Vuelve al ataque.
Aviso Trialun, que se transformo en un enorme gorila y salto sobre el terrible Kruls apretándole con las dos manos el cuello. Necors cambio de raíz a árbol y con sus ramas golpeaba con todas sus fuerzas al indomable Kruls, pero el mal bicho no caía, agarro a Trialun y lo volvió a lanzar contra la pared, seguidamente arranco a Necors del suelo con raíces incluidas y lo estampo brutalmente contra el suelo. Nuestros dos valientes estaban mal heridos, agotados y apenas sin fuerzas y tirados en el suelo veían como el Kruls agarro una enorme piedra la levantaba sobre su cabeza y se dirigía hacia Nerea con la intención de acabar con ella. Nerea que todavía seguía sufriendo los síntomas de la asfixia apenas tenia fuerzas para moverse.
- ¡NOOOOO!
Grito Trialun desesperado al ver que no tenía posibilidades para ayudar a nerea.
Pero Necors tenía un as escondido en la manga, se transformo en una jabalina y rodó asta los pies de Nerea, y telepáticamente hablo:
- Nerea, Nerea despierta, coge fuerzas de flaqueza y lánzame hacia el Kruls.
- No puedo, no hay esperanza esto es el fin tenemos que asumirlo.
Mientras el despiadado ser estaba cada vez mas cerca cargado con la enorme piedra y con una sola idea aplastar a la pequeña elegida.
- ¡Maldita sea! Lucha, no te rindas tu eres nuestra única posibilidad de sobrevivir. - Grito Necors muy alterado.
Nerea levanto la cabeza, cojio la jabalina y gritando con rabia la lanzo contra el Kruls atravesándole el corazón.
El Kruls se quedo parado, tiro la piedra a un lado y se miro el pecho, agarro la Necorsjabalina con las dos manos intentando sacársela, pero Necors se resistía con todas sus fuerzas a salir de esa mala bestia.
Sin previo aviso comenzó un terrible terremoto, todo comenzó a derrumbarse y el suelo volvió a agrietarse abriendo una enorme brecha por la que corría un rió de lava, el malherido Kruls comenzó a tambalearse y cayo por la grieta hacia el rió de lava arrastrando consigo a Necors y condenándolo a su fin.
- ¡NECORS.............!
Grito Nerea, mientras se arrastraba con el brazo estirado, intentando ayudar a su amigo, pero por desgracia no pudo hacer nada, solo ver como su amigo se hacia cenizas.
- ¡No te rindas nunca, sigue luchando!, esas fueron las ultimas palabras telepáticas de Necors cuando desapareció clavado en el Kruls.
Mientras, la situación se estaba poniendo muy fea.
- ¡Nerea! Reacciona maldita sea, coge el poder y vámonos, esto se derrumba. - Le grito Trialun.
Nerea reacciono y se acerco al poder de la tierra absorbiéndolo.
Salieron de la gran galería y corrían por el largo túnel viendo a lo lejos la luz que les indicaba la anhelada salida.
La montaña se les caía por momentos y creían que no llegarían a tiempo a la salida para salvar sus preciadas vidas, entonces Trialun actuó, se transformo en un Guepardo.
- ¡Sube a mi lomo y vuela conmigo!.
Trialun corrió a una velocidad endiablada alcanzando la salida justo en el segundo antes de que la montaña se convirtiera en un montón de piedras y polvo.
Nuestros héroes destrozados física y mentalmente cruzaron de nuevo la cascada al encuentro de Natura y de un descanso merecido.
- Son momentos difíciles, momentos tristes, pero la hora de la gran batalla esta cerca y debemos estar preparados para no fracasar.
Descansar y curad vuestras heridas, mañana os espera el último poder, el de la luz de nuestro gran señor el Sol.







V

El Cuarto Poder
“Luz”


Después de hablar Natura hubo unos minutos de silencio y de recuerdos hacia los amigos que se fueron tan heroicamente, seguidamente Nerea reflexionó
- ¿Si conseguimos el cuarto poder de nuestro planeta, todo habrá terminado para siempre, acabaremos con la maldita Sombra? - Pregunto Nerea,
- Me temo que no, como ya te dije la sombra también forma parte de la vida y no puede ser destruida, solo aislarla, hacerla inerte pero latente como un depredador espera paciente su oportunidad para atacar a su presa y dependerá de la conducta humana su regreso. - Resumió Natura sabiamente a Nerea.
- Entonces cuando tengamos los cuatro poderes del planeta Tierra, ¿Qué se supone que tengo que hacer?
Pregunto una inquieta y curiosa Nerea.
- Los cuatro poderes juntos te proporcionaran el don de hablar a todos los seres vivos, ellos te escucharan telepáticamente no importa si están dormidos o despiertos, atentos o distraídos y tu misión será convencerles de lo importante que es el que cambien en su actitud destructiva. - Contesto Natura a su pregunta.
- Pero eso es imposible, ni las naciones del mundo se ponen nunca de acuerdo, ¿como una simple niña los va a convencer. - Replico Nerea.
- Pues en tus palabras están nuestras esperanzas.

Nerea se quedo callada pero muy pensativa, intentaba encontrar las palabras adecuadas, sin pensar que aun tenia que conseguir el poder de la LUZ y no iba a ser tarea fácil.
Nerea se echo sobre unas hojas secas para intentar descansar, pero su mente no paraba de recordar todo lo que había pasado y sobre todo de sus dos amigos Sarox y Necors.
A la mañana siguiente nuestros héroes estaban listos para la última batalla, la definitiva.
- Tened cuidado, ya hemos perdido a muchos amigos no quiero perder a mas. - Suplico Natura a su pequeño ejército.
Nerea y Trialun se miraron unos instantes y Nerea dijo con voz decidida:
- ¡Vamos a darles caña!
- Bien dicho, estoy listo. - Respondió Trialun.

Los dos cruzaron de nuevo la cascada mágica que los traslado al planeta Aristos donde se decidiría el destino de nuestra Tierra, se encontraron en un paisaje llano como una carretera, árido y seco, a lo lejos divisaron algo que hacia destellos intermitente.
- Debe ser aquello que brilla.
Afirmo Nerea, los dos soldados, lobo y niña se encaminaron hacia su destino, al subir a una pequeña loma divisaron el poder de la luz del astro sol de nuestra galaxia, pero también vieron horrorizados un inmenso ejercito de miles de Kruls preparados para el combate.
- ¡No! No podemos ganar son demasiados. - Exclamo Nerea abatida por el paisaje funesto de ese enorme ejercito.
- Si la verdad es que son muchos va a ser muy difícil derrotarlos. - Replico Trialun.
- Pues tú dirás que podemos hacer.
- Ya se podemos rodearlos y atacar por sorpresa.
- Trialun estoy hablando en serio. - Regaño Nerea a su amigo.
- Esta bien he pensado en transformarme en una pequeña hormiga, acercarme sigilosamente al cuarto poder cambiar a águila recuperar la Luz, alzar el vuelo y volver hasta ti para que puedas absorberlo, que te parece mi plan.
- Parece muy arriesgado pero creo que no tenemos mas opciones.
Trialun se transformo en la pequeña hormiga y comenzó a cruzar entre el inmenso ejercito de Kruls, Nerea se quedo agazapada esperando que la misión saliera a la perfección.
Mientras nuestro diminuto héroe estaba ya frente al poder de la Luz, cuando de repente escucho gritar a Nerea, había sido descubierta, los Kruls se abalanzaron sobre Nerea que aunque se defendió con uñas y dientes fue reducida rápidamente.
Trialun se transformo en mariposa y alzo el vuelo, desde lo alto vio que el solo no podía salvar a su amiga, decidió volver a la Tierra y pedir ayuda a Natura por que era la única posibilidad que les quedaba.
Mientras nuestra pequeña fue atada a un poste de madera a la espera de la sombra que regresaba desde la Tierra para saldar cuentas con Nerea.
La pobre niña pasó la peor noche de su vida atada y esperando un final terrible, pero poco antes de amanecer ocurrió algo inesperado: del suelo salio Trialun en forma de topo.
- ¡Trialun! has vuelto.
- Silencio que nos pueden descubrir.
Trialun trepo por el poste y corto las cuerdas liberando a Nerea seguidamente aparecieron dos enormes águilas que elevaron a la pequeña alejándola del peligro, pero sin querer alertaron al terrible ejercito de Kruls que se prepararon para la batalla.
Los Kruls lanzaron una lluvia de flechas que derribaron a las dos aves dejando caer a Nerea, suerte que no estaba muy alto.
- ¡Trialun has vuelto!. – Volvio a repetir Nerea.
- Por supuesto que te creías, que te iba a abandonar. - Respondio su fiel amigo.
- Tenemos un serio problema, somos solo dos contra miles.
Analizó Nerea la situación que se presentaba ante sus ojos, que veían como el enemigo se acercaba presto al combate.
- Ojala Natura nos pudiera ayudar. - Suspiro Nerea.
- Natura ya nos ha ayudado, convocando a las últimas fuerzas de nuestra Tierra y manteniendo la cascada abierta, sacrificando sus últimas reservas de vida y cayendo en un profundo sueño.
- ¡Eso es terrible¡ - Replico Nerea.
- Solo podemos hacer una cosa, devolver los cuatro poderes de la Tierra para salvar a Natura.
Trialun aulló como nunca lo había echo, el suelo comenzó a temblar como si estuviera ocurriendo un terremoto.
De una pequeña colina empezaron a aparecer animales de todas las especies: elefantes, rinocerontes, jirafas, ñus, búfalos, cebras, caballos, hienas, leones, tigres, panteras, guepardos, jaguares, cabras, antílopes, en fin parecía como si el arca de Noe hubiera atracado cerca.
Pequeños y grandes animales estaban representados, por supuesto también habían acudido los reptiles: serpientes, lagartos, cocodrilos etc. etc., insectos de todo tipo y tamaño, aves, la mejor aviación de combate cubrían el cielo preparando el ataque.
- ¿Como lo has conseguido? - Pregunto Nerea alucinando.
- No ha sido por mi ha sido por ti tu eres nuestra ultima esperanza y merece la pena luchar por nuestro hogar. la Tierra. - Respondio Trialun, mientras el ejército animal comenzaba a avanzar hacia el enemigo.
El choque entre los dos ejércitos fue terrible, la batalla paso a ser cruel y sangrienta, nuestros aliados luchaban con gran valor, sin temor pero no eran suficientes aun así iban a luchar hasta el final, aunque en ello les llevara la vida.
Entonces un enorme elefante se acerco a Nerea.
- Súbete a mi lomo pequeña, intentare llegar al poder de la luz.
Nerea no dijo nada, solo se limito a seguir las indicaciones de su nuevo amigo, el elefante se introdujo en medio de la batalla intentando atravesar la fuerte resistencia que ejercían los Kruls, a medida que avanzaba Nerea se dio cuenta de los crueles y despiadadas que son las guerras, de las miles y miles de vidas que se habían perdido y sin embargo los pobres animales seguían luchando, mientras el ser humano estaba cómodamente sentado sin preocuparse de nada.
El pobre elefante estaba ya mal herido pues había recibido multitud de impactos de flechas pero se resistía a rendirse, cuando desafortunadamente una lanza Kruls se le clavo justo en el corazón.
El inmenso soldado cayó de costado tirando a Nerea al suelo.
Tirada en medio de la batalla Nerea se sintió desprotegida pues ella no sabia luchar, un mal bicho Kruls se acerco a la pequeña y empuñando una espada la alzó sobre su cabeza dispuesto a partir en dos a la elegida, pero a veces lo que menos esperas ocurre.
Una flecha Apache impacto en el despiadado Kruls derribándole en el acto.
Nerea dirigió su mirada hacia donde había venido la flecha y vio sorprendida difusamente, como a un fantasma a su amigo Sarox que le saludo brevemente y desapareció dejando paso a miles de indígenas venidos de todos los continentes: indios americanos, Apaches, Arapajohes, Cheyenes, Siux, descendientes de los incas y de los Mayas, de Brasil, tribus del amazonas, indígenas de Australia, los mejores guerreros del continente Africano, incluso habían venido esquimales de los lugares mas fríos de nuestra Tierra.
Todos habían sido llamados al combate por Sarox que se apareció en los sueños de los grandes jefes de las tribus indígenas de nuestro mundo.
El nuevo ejercito entro de inmediato en combate reforzando al ejercito animal y juntos poco a poco, vida a vida hacían retroceder a los Kruls.
Uno de los indios consiguió acercarse a Nerea y la subió a la grupa del caballo y se dirigió hacia el poder de la Luz.
Mientras el resto de soldados de la Tierra seguían luchando con gran valor, algunos indios portaban alforjas que iban llenas de semillas, no unas cualquiera sino recogidas del bosque de Necors y por supuesto muy diferentes de las que conocemos, pues al caer al suelo brotaban inmediatamente árboles con vida propia que se unían al combate que por supuesto tenían cuentas pendientes por la muerte de su mejor guerrero: Necors.
El reino vegetal luchaba codo con codo con los humanos y los animales.
- ¿Quien eres tú? - Pregunto una desconcertada Nerea.
- Soy Humar, hermano del gran guerrero Sarox todos hemos sido convocados a la lucha por el.
- ¿Sarox te llamo?.
- Nos llamo a todos por ti, mi pequeña guerrera.
Nerea se quedo unos instantes recordando a su buen amigo Sarox, pero sabía que tenía un cometido que cumplir y si no lo lograba la muerte de sus amigos y aliados no tendría ningún sentido.
Por fin el joven guerrero alcanzo el lugar donde estaba ubicado el poder de la luz, la cruenta batalla llegó a su fin, vencedores a un alto precio los aliados de la Tierra, pues pocos quedaron para recordar su gesta.
Nerea se bajo del caballo y se acerco a la Luz, puso su mano encima y absorbió el último poder de la vida en la tierra.
Ahora tení en su interior los cuatro elementos básicos para la vida: agua, tierra fértil, oxigeno y la luz de nuestro sol, pero aun le quedaba su peor pesadilla enfrentarse a la sombra.
Pero esta vez Nerea estaría sola, nadie le podría ayudar, debía enfrentarse a la sombra, ese era el destino de la elegida.
De repente el cielo se ennegreció y ahí estaba la terrible y destructiva Sombra, Nerea con muchos miedos pero con determinación se plantó frente a su enemigo, pero una duda la invadió, ella no sabía luchar, Natura aunque ya estaba al límite de sus fuerzas hablo desde la distancia a su pequeña guerrera.
- Coge tus armas, son los cuatro elementos de la vida, nada puede detener el ciclo vital, siempre se hace camino.
Nerea cerró los ojos, extendió los brazos y una luz blanca la envolvió elevándola hacia su destino.
Nerea se detuvo a la misma altura de la sombra, su luz blanca cogió intensidad y un potente chorro de luz impacto en la sombra, un grito desgarrador se escucho en todo el planeta Aristos, la sombra se estaba debilitando pero sacaba fuerzas de su maldad y resistía el ataque y poco a poco se acercaba a Nerea.
Si conseguía envolverla en un abrazo mortal Nerea estaba condenada, entonces Nerea arranco de su interior su fuerza vital y aumento la potencia del rayo de luz.
Una fuerte explosión precedió a un silencio absoluto, detrás de una enorme nube de polvo Trialun pudo ver una bola de cristal negra como el carbón, la sombra había sido vencida y encerrada, al lado cuatro bolas mas de cristal cada una pertenecía a un poder de nuestra Tierra.
Una azul, el poder del agua, otra marrón el de la tierra fértil, la tercera transparente la del oxigeno ó C.O.2, y la cuarta contenía en su interior una luz muy luminosa y de un tono amarillo evidentemente era el poder de la luz, justo debajo de las cuatro bolas se encontraba Nerea tirada en el suelo, inerte y con su piel muy pálida, Nerea había sucumbido en el fragor de la batalla………………………….
- ¡NO, Nerea tu no, tu no!.
Grito Trialun, invadido por la desesperación, Nerea había caído en combate.
Al ver que los cuatro poderes de la Tierra no eran suficientes para vencer a la sombra, utilizó su fuerza vital, gracias a ello venció pero pagando un precio muy alto.
- Jamás he visto un acto de tal valor y coraje.- Dijo Humar el hermano de Sarox con la voz entrecortada.
- Mi pequeña niña tu no puedes morir eres nuestra esperanza, ahora sin ti todo ha sido en vano. - Sollozo Trialun al cuerpo inerte de Nerea mientras unas lágrimas manaban de sus azules ojos.
Los supervivientes de la gran batalla se arremolinaron alrededor de la elegida y un tigre pregunto: ¿Por que dices que todo ha sido en vano? ¡Hemos ganado!
- Solo si la vida es poderosa podrá mantener a la Sombra en su celda de cristal. Hoy solo ha sido una batalla ganada, pero la sombra sigue viva aunque encerrada, si la humanidad no cambia de actitud, con el tiempo la vida de la Tierra volverá a debilitarse y la sombra aprovechara para escapar y de nuevo intentara destruir nuestro planeta, por eso Nerea era la única que poseía el poder para hablar a la humanidad y convencerles para cuidar la vida de nuestra amada Tierra, es la única forma de mantener a la sombra eternamente encerrada. - Respondio Trialun al tigre.
Una misteriosa voz se escuchaba en todas partes débil pero entendible:
- Recordáis que os dije que la vida no puede ser destruida, que siempre se abre camino aunque le cueste millones de años si las condiciones son las adecuadas al final siempre vuelve……… eso si necesita sus cuatro pilares : tierra, agua ,aire y luz y Nerea los ha recuperado.
Era Natura que se presento en el campo de batalla y les recordó a los supervivientes que la vida es poderosa.
- Natura estas aquí ¡tu puedes salvar a Nerea¡ - Dijo Trialun muy nervioso.
- Mi valiente amigo yo no tengo ese poder, mi misión es que todo tenga un porqué y que todo tenga un equilibrio constante para darle sentido a la vida.
- Pero quizás la vida encuentre la razón de que Nerea siga con nosotros.

De pronto las cuatro bolas de los cuatro elementos se elevaron sobre Nerea y comenzaron a girar y girar, una luz multicolor como el arco iris impacto sobre el cuerpo inerte de la elegida devolviéndola de nuevo a la vida.
Todos los allí presentes gritaron de alegría.
- ¿Hemos ganado? Pregunto Nerea nada más recuperar la conciencia.
- Si mi pequeña guerrera, pero solo a medias aun te queda lo más difícil, tienes que hablar a la humanidad.- Le respondió Natura.
- ¿Pero que les digo?, no se como convencerles, la humanidad es muy complicada y compleja solo hacen cosas por interés lucrativo. Nunca se ponen de acuerdo, cada uno va a lo suyo y creo que lo que menos les importa es la naturaleza.
- Escucha tu corazón, el te dictara las palabras adecuadas. - Le respondio Natura.
- Lo mas seguro es que no quieran escucharme.
- Ahora que he recuperado mi fuerza, haré que tu voz resuene en sus cabezas, da igual que estén dormidos o despiertos, gritando o en silencio, te escucharan y la humanidad se detendrá para oír tu voz.
- Solo con un pensamiento sincero de los humanos, con un compromiso de cambiar y salvar la vida, se conseguirá una cadena perpetua para la Sombra.
- Da igual que sean niños o adultos todos debemos estar unidos y con simples gestos del DIA a DIA podemos hacer grandes cosas: como reciclar en vez de fabricar, andar en vez de coger el coche, proteger los bosques, aprender a respetar y amar a todos los seres vivos, cuidar nuestros ríos y mares, pero todo esto solo se lograra si todos estamos dispuestos a esforzarnos para salvar nuestro planeta.






Epílogo


Nerea se quedo unos instantes pensando en silencio y comenzó a caminar hacia una pequeña loma, subió y se paró, respiró profundo y escuchó su corazón y entonces comenzó a hablar a la humanidad.

“Escuchadme todos, soy una más de entre vosotros un ser humano, que acaba de librar una batalla por la vida y en defensa de la naturaleza.
¡La Naturaleza ¡si, es la que os regala cada DIA oxigeno para que podáis respirar, tierra fértil para cultivar los alimentos, agua para calmar vuestra sed, luz que os de calor e ilumine el mundo.
No os dais cuenta de las atrocidades que estáis cometiendo, de la destrucción y la devastación que habéis inflingido a vuestra propia casa, vuestro hogar.
Si, es vuestra casa, el mundo, estoy convencida que en vuestro hogar de ladrillos y hormigón no quemáis los muebles, no arrojáis la basura al suelo, ni vertéis aceites ni productos químicos en el agua que utilizáis a diario.
Entonces, ¿Por qué lo hacéis fuera?, pensar en el mañana, para que los hijos de vuestros hijos puedan disfrutar de las maravillas que les ofrece la naturaleza.
En vuestras manos esta el futuro de todos los seres vivos, solo os pido que penséis y que razonéis en hacer lo correcto y seguro que llegáis a una sola conclusión, salvar la Tierra.
Por que hay que cuidar y mimar nuestro hogar, el hogar de todos los seres vivos”.

Como predijo Natura la humanidad se detuvo y el silencio invadió el planeta tierra para escuchar atentamente a Nerea.
Nadie jamás comento nada de lo ocurrido, pero las palabras de la elegida despertaron la conciencia de la humanidad, desterró la codicia y la ambición, arrancó las vendas de sus ojos y pudieron ver las atrocidades cometidas contra la naturaleza.
Nerea se despidió de sus valientes amigos y regresó a su casa, pero antes supo que el planeta Aristos iba a recuperar la vida aunque costaría unos cuantos millones de años, pero eso ya son cosas de la evolución de las especies.

Imaginemos por un momento, o mejor por una eternidad, que el mundo es como lo conocemos y como lo vemos, maravilloso y lleno de vida por sus cuatro costados.
Pensemos que nuestra mirada surca los cielos arrastrando nuestras mentes y desde lo alto vemos el mundo, nuestro mundo.
Ahí abajo están las montañas que rebosan de vegetación, los bosques llenos de árboles fuertes, sanos y altivos.
Los ríos fluyen llenos de vida hacia los océanos limpios y plagados por selvas marinas, los cielos despejados descubriendo las ciudades que forman parte del paisaje sin alterar el medio ambiente.
Detengámonos en una de esas ciudades, entremos en una de sus casas, pero no en una cualquiera, si no en una en especial, entremos pues y averigüemos.

La tele estaba encendida al fondo del comedor y se escuchaban las noticias:
Afortunadamente hoy tenemos muy, pero que muy buenas noticias, las Naciones Unidas se han reunido con carácter urgente y en solo cuatro horas de debate se han aprobado nuevas leyes para proteger la naturaleza y todas las especies en peligro.
También se han iniciado proyectos a nivel mundial para plantar millones de árboles, la limpieza de ríos y océanos y la puesta en marcha de energías alternativas y no contaminantes, y bla, bla, bla, bla...





FIN



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Reservados todos los derechos



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